jueves, 1 de marzo de 2012

Laura y sus amigos

Erase una vez una niña que estaba jugando con sus amigos a la pelota. De repente, le dieron una patada a la pelota y se perdió,... los niños estuvieron buscándola,buscando Laura tropezó con una piedra y se cayó a un pozo muy hondo,los demás amigos también se tiraron al pozo a buscarla.
Allí la encontraron y descubrieron una puerta mágica que llevaba a una ciudad encantada y otra a una ciudad terrorífica ellos estuvieron un buen rato pensando porque si abrían la puerta mala se quedarían allí encerrados para siempre. Entonces por suerte eligieron la buena y un arco iris mágico los transportó hacia el centro de la ciudad,allí todo era muy bonito.
A lo lejos vieron una cosa redonda rosa allí estaba su pelota y Laura dijo: “ vamos a jugar” y los demás dijeron que sí y así estuvieron toda la tarde jugando.Cuando se cansaron se fueron.Laura dijo: “ otro día tenemos que venir a nuestro lugar secreto a jugar, adiós”.
Todos se fueron a su casa y fueron felices.

Lucía Cabrera García

Fernando el cocinero

Erase una vez un niño que se llamaba Fernando. A él le gustaba mucho la comida y su madre siempre le hacía dos platos cada día y como hacía deporte no engordaba.
Pero cuando se hizo grande tenía que irse a vivir a otro pueblo para buscar trabajo. Fue a Granada y no sabía nada de cómo era, donde estaba su casa, no tenía amigos... Él estaba muy perdido pero cuando menos lo esperaba apareció un hombre que le dijo que él se sabía todo Granada y si le decía la calle lo llevaría. Le dijo que cómo se llamaba y dijo que se llamaba Juan. Le llevó a su casa y le invitó a pasar,... hablaron, rieron y se despidieron. Cuando se fue, Fernando tenía mucha hambre, fue a su cocina pero... No había comida, pensó que podía estudiar para cocinero porque se había fijado de cómo de pequeño, cocinaba su madre. Buscó trabajo y le dieron uno cerca de su casa. El primer día le salió muy bien porque casi que no había clientes. Y desde ese día fue cocinero y a lo largo del tiempo se hizo dueño de ese bar.

Jose Ujaque Ruiz

Cuando los cerdos volaron

Erase una vez una pandilla de niños llamados Carlos, Ivan y Alberto. Una vez jugando en la casa de Carlos subieron al desván. Encontraron cosas viejas como muebles, lamparas, baúles etc..
Los niños, al encontrar un baúl se sorprendieron y dijeron: “Vamos a abrir el baúl como en las películas a lomejor encontramos algo”.
Los niños abrieron el baúl y encontraron un libro viejo con mucho polvo, abrieron el libro y
descubrieron que era un libro de mágia.
Estuvieron un rato mirándolo y averiguaron que estaba en latín. Iván, que sabía latín tradujo el libro. Había varios conjuros...
De repente, apareció una palabra rara la cual Iván quería que Alberto y Carlos la pronunciaran a la vez.
Salieron a la calle y...¡¡¡ había cerdos volando!!!.
Iván se empezó a reír y Carlos y Alberto le decían
a Iván: “Tienes que parar esto”, Ivan se quedó pensativo y, con miedo les dijo a sus amigos que no sabía cómo pararlo.
Los tres niños subieron a la habitación de Carlos para averiguar cómo podrían parar ese conjuro. Buscaron en internet y después de media hora encontraron la solución...: Era.. “ Decir el conjuro al revés”. Subieron al desván.
Los tres niños dijeron el conjuro al revés y desde ese día aprendieron a no tocar más ese libro.

Alejandro Revelles Carrasco

Un extraño ser

Un día Sandra y sus amigos quedaron para ir a un parque de atracciones de su pueblo, al que acudían todos los años. Al llegar allí se dieron cuenta de que este parque al que tenían ilusión de ir estaba desierto. Entonces Sandra tuvo la idea de ayudar a que el parque no terminara abandonado,pues le tenían mucho aprecio. Con ayuda de sus amigos hizo grandes avances en la mejora de aquel parque que para ellos era tan importante,pues allí habían compartido muchos momentos juntos.
Unos se encargaban de limpiar, otros se reparar...Todos tenían algo que hacer, así que Sandra se dio un paseo por el parque y encontró una atracción que no había visto antes. Al verla se le ocurrió que podría entrar en ella, pues a Sandra le llamaba la atención. Al entrar allí vio algo extraño, que no veía con claridad,una especie de animal diferente a todos los demás. Aquel animal se asustó y echó a correr y en aquel momento Sandra intentó seguirle pero era tarde, ya no lo podía alcanzar. Al salir de allí, fue a contarle a sus amigos lo que había sucedido, y ellos con ganas de poder ver a aquel extraño ser empezaron a buscar en esta atracción. Buscaron y buscaron,no pararon de buscar, pero no encontraron ni rastro de aquel extraño animal. Ya cansados de buscar, olvidaron lo sucedido y no volvieron a hablar de este ser tan diferente a todos los demás.

Mª Ángeles Cereto

Un día sin pan

Erase una vez un pueblo donde amasaban un pan riquísimo.
A un niño llamado Marcos su madre le dijo: “vé a por dos barras de pan”. El niño fue a la panadrería y cuando iba de camino a su casa vio a sus amigos, se paró a jugar al balón y dejó las dos barras de pan en el suelo. Mientras jugaba un perro paseaba por allí, y cuando se dio cuenta Marcos sólo estaba la bolsa sin las dos barras de pan.
El niño cuando fue a su casa, no llevaba el encargo de su madre. Su madre se enfadó mucho con él porque no podían comer y no lo mandó nunca más a ningún mandado.

Jaime

EL NIÑO MÁGICO

Erase una vez un niño que tenía poderes pero no lo sabía.
Una mañana un dragón fue a su pueblo a buscar comida.
El dragón se lo comía todo y destrozaba las casas, la gente le tenía
miedo porque se quedaron sin alimento para vivir.
El niño estaba harto de que el dragón se comiese la comida de todos,
entonces fue a luchar con el dragón.
Tenía que ir a la isla Calavera donde, el dragón vivía en una cueva en lo alto de una montaña.
Pero el problema era cómo llegar a la isla,era bastante difícil.
Cuando estaba de camino apareció un pescador. El niño le preguntó si le dejaba la barca para ir a la isla Calavera, el pescador le dijo que sí, pero que quería que le devolviera la barca sin ningún rasguño.
Una vez allí derrotó al dragón y descubrió que tenía poderes y el
dragón nunca molestó más a su pueblo.

Daniel Candela

ANÉDOCTA

El día de los inocentes hicimos una gran broma a mi madre.
La broma consistía en tirar las mesas, tirar los cajones ,...y lo peor fue esconder el dinero. Mis hermanas y yo nos escondimos debajo de las camas.Cuando llegó mi madre se enfadó con nosotros.
También le hicimos otra broma esa broma consistía en ponerle una cucaracha de goma en la hamburguesa y esa broma colmó el vaso y mi madre no nos habló en una semana.

Flori Serrano

ANÉCDOTA

Estaba con mi prima en la casa de un amigo de mi padre que era carpintero, mis padres estaban hablando y mi prima y yo cogimos unos botes de pintura y nos pusimos a pintar las paredes. Pintamos estrellas etc y mis padres al salir lo vieron y nosotras les dijimos que no habíamos sido.
Los amigos de mis padres tenían una cámara para que no les robaran, nos pillaron y nos castigaron y nosotros, aunque teníamos la partida perdida ,lo negamos y nos castigaron mucho más porque tuvimos que decir la verdad.

Isabel Mª Pardo

ANÉCDOTA

Cuando era pequeño, estaba jugando en la escalera a tirar los coches, se quedó uno a medias, fui a cogerlo, me escurrí y bajé todas las escaleras de culo.

Dani Candela

ANÉCDOTA

Un día estaba con mis primos en su casa de Córdoba. Estábamos jugando al escondite, me tocaba contar a mí , mis primos se escondieron en el vestidor de sus padres, y mi hermano se escondió detrás del pozo del patio. Cuando fui a buscarlo, no me quería acercar al pozo, porque mis primos me habían contado una historia de miedo. Pasé de buscar a mi hermano y lo que hice fue buscar a mis primos, los encontré. Paco se puso a contar y estuvimos así toda la tarde.
Después de cenar, cuando ya habíamos terminado de jugar, nos metimos en la cama a ver una película. Yo me dormí la primera, pero tuve una pesadilla de lo que me habían contado mis primos, me desperté y no dormí bien. Antes de que mi hermano se durmiese, me tocó el brazo y yo me asusté. Al despertarme mi hermano tenía la cabeza muy cerca de mi cara, por lo que no lo vi con claridad y me asusté más todavía. Le empujé con todas mis fuerzas y se dio en la cabeza. Al encender la luz eran mis primos que le habían puesto una careta a mi hermano y me estaban gastando una broma.

Cristina Román López.

ANÉCDOTA

Una vez cuando yo era pequeña...Estaba con mi madre en un centro comercial..y yo me perdí..y me puse a bajar escalón por escalón y a buscar a mi mamá...llegó un momento en que me rendí y me puse a llorar tirándome en el suelo gritando “Mama, mama” y resultaba que mi madre me estaba siguiendo todo el rato, siempre detrás mía sin que yo me diese cuenta.

Carla Costa

La niña nueva ( diálogo)

María; Hola, ¿cómo te llamas?
Isabel:Hola, me llamo Isabel ¿eres nueva aquí?
María:Sí, soy nueva y no conozco a nadie, ¿quieres ser mi amiga?
Isabel:Vale
Cristina:Hola, ¿cómo te llamas.?
María: me llamo María y ¿tú?
Cristina: Cristina
Isabel: hello Cristi,¿os venís a clase de historia?
Cristina:ok
Isabel: ¿te vienes María? Aunque es muy aburrida
María:¡que va! si es muy divertida ,es mi asignatura favorita ,los mulsurmanes son.......
Cristina e Isabel :venga ya!! que llegamos tarde.
Isabel:Menos mal que ya se ha acabado
vamos a comer algo a la bocateria, estoy hambrienta.
Cristi:Yo no puedo, he quedado con mi novio.
Isabel:Pues vale, ¿ nos vemos esta noche? Voy a celebrar una fiesta pijama ¿María, quieres venir?
María; hoy no puedo me voy al cine con mis mejores amigas.
Isabel y Cristina:Tienes amigas?
Cristina:Pero...
Isabel:Creíamos que tus únicas amigas aquí eramos nosotras
María:es broma feliz día de los inocentes jjejejejeje
Isabel y Cristina:aaaaa jajaja
Cristina:Chao, hasta la noche.
Isabel: Adiós
María:Au revoire

Autoras:María Aránega Dengra
Isabel María Pardo Martinez
Cristina Román López

El boli mágico III

Hola, como os dije hoy voy a cometer un error muy grande; veamos cual:
Como me aburría dibujé un paisaje con un sol, una casa, árboles,...
pero, como era muy grande, no podía venir el paisaje así que el boli decidió llevarme a mi al dibujo.
Pero allí lo que había era sólo lo que dibujé hasta el vaso de agua y lo demás era todo blanco.
Como también vino el boli me puse a pintar como los bebés, es decir, rallando todo porque no sabía qué dibujar.
El dibujo se levantó y al verlo de pie parecía un monstruo ahí también vi una puerta gigante. Lo raro es que el monstruo no vino hacia mi, sino hacia la puerta y cuando la abrió vi mi casa. La hice buena porque con sus pisadas rompían la carretera y de vez en cuando algún coche. Yo pensé: "como se entere la policía de que lo he creado yo, me mandarán a un centro de menores."
Venga hasta el viernes.

Jonathan Olivares Da Costa

El boli mágico II

¿Os acordáis del capitulo uno?...¿Queréis que os lo recuerde?
Pues os lo resumo y auh....:
Un día me encontré un boli, me fui a dormir, os hice reír, me desperté y os puse en intriga.
Y a día de hoy os lo voy a contar:
¡Cuando escribí con el boli!, me cansé de escribir ¡Pero! me puse a dibujar, y como estaba cansado dibujé un refresco ¿Y a que no sabéis lo que paso? Pues el refresco que dibujé salió del dibujo y era malvado,... sí, como lo escucháis porque era agua y no un refresco, pues si era esto ... vosotros estaríais pensando que se transformaría en un robot o algo así como los transformes ¿nooo? Ja,ja,ja,... pero eso quería decir decir que todo lo que dibujarás se haría real.
Ahora voy a preguntar a tres niños y niñas qué dibujarían, pero solo pueden decir una cosa. Por ejemplo yo dibujaría un montón de billetes de 500€.
En el tercer capitulo sabréis el desastre que cometí, como siempre pero más grande.
¡Hasta el viernes!

Jonathan Olivares Da Costa

El boli mágico I

Esta es mi historia, comienza así:
En un simple día cualquiera de verano,
me encontré un boli, estaba al lado de mi cama, como encontré una cosa me puse a buscar más y encontré una cosa muy importante, era... bueno eso no viene a cuento, ¿por donde iba? Ah si, me encontré un boli al lado de mi cama y, como era tarde me fui a dormir !pero¡ al día siguiente. Bueno como es siguiente mañana te lo cuento.
Jajaja, era broma, cuando me desperté, desayuné y después me puse a pintar con el boli que me encontré, ¿y... a que no sabeís lo que pasó? En el próximo capitulo lo sabremos.
Continuará...

Jonathan Olivares Da Costa